Cada día, ochenta niños, niñas y jóvenes reciben una comida nutritiva en el Comedor Escolar de CEMVA. Dos cocineras preparan los alimentos, mientras una administradora, una educadora y nuestros voluntarios supervisan la comida y mantienen el orden.

La mayoría de los niños paga una pensión mensual de 75 Bolivianos (ca. 8 Euros), no abstante, este monto cubre ni la mitad de los costos reales. Además, debido a la difícil situación económica de muchas familias, algunos niños pagan menos a aportan víveres, mientras otros, sobre todo de familias pobres y numerosas, no pueden pagar nada.

El Comedor Escolar aporta una contribución importante en la lucha contra la malnutrición y los problemas resultantes, como son enfermedades o déficit de desarrollo. Los niños aprenden también a lavarse las manos antes de la comida y a cepillarse los dientes después.

Periódicamente organizamos conferencias y charlas sobre temas como higiene, salud y educación para los padres de familia.